El spam telefónico persiste a pesar de la prohibición

Desde la entrada en vigor de la nueva Ley General de Telecomunicaciones en junio de 2023, las llamadas comerciales no solicitadas, conocidas como "spam telefónico", quedaron prohibidas. Sin embargo, muchas empresas continúan evadiendo las restricciones legales mediante diversas estrategias. Según una encuesta de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 90% de los ciudadanos afirman haber recibido este tipo de llamadas en los últimos meses.

Excepciones y lagunas legales

Si bien algunas empresas infringen directamente la normativa, otras se amparan en excepciones o interpretaciones flexibles del concepto de "interés legítimo". Esto les permite contactar a antiguos clientes hasta un año después de su última transacción o realizar llamadas si consideran que el contenido tiene interés público. Además, los números profesionales, como los de autónomos o empresas, pueden ser contactados sin infringir la regulación.

Otra táctica utilizada es la derivación de las llamadas a "call centers" en el extranjero para dificultar la trazabilidad y aplicación de sanciones.

Consentimiento y estrategias para evitarlo

La legislación actual exige que los usuarios otorguen un consentimiento explícito para recibir llamadas comerciales. No obstante, muchas empresas incluyen esta autorización en términos y condiciones que los usuarios aceptan sin percatarse. Un dato preocupante de la encuesta de la OCU revela que el 20% de los encuestados recibieron llamadas sin que la empresa se identificara, lo que infringe la normativa de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD).

Opciones para evitar el spam telefónico

Para reducir la recepción de llamadas comerciales no deseadas, se recomienda:

  • Bloquear los números molestos directamente en el teléfono.

  • Activar la detección de spam, disponible en dispositivos Android y Apple dentro de los ajustes de llamadas.

  • Registrarse en la Lista Robinson, un sistema de exclusión publicitaria que restringe las llamadas comerciales sin consentimiento previo.

Finalmente, según la AEPD, toda llamada comercial debe comenzar con la identificación del responsable, la finalidad de la llamada y la opción de revocar el consentimiento o ejercer el derecho de oposición. Con estas medidas, los usuarios pueden reducir la intrusión del spam telefónico en su vida diaria.